Mi objetivo con la fotografía gastronómica es capturar no solo la belleza de los alimentos, sino también la pasión y el detalle que hay detrás de cada receta.

Trabajo cada sesión de manera cuidadosa, destacando texturas, colores y presentaciones para que tus platos se vean irresistibles y despierten emociones en quien los vea. Desde fotografía de fondo blanco para menús y delivery, hasta composiciones más elaboradas para redes sociales, libros de cocina o campañas publicitarias.

Entiendo que en el mundo gastronómico, una buena imagen es tan importante como el sabor, porque es el primer contacto que el cliente tiene con tu propuesta.